La última semana

Un rodaje tranquilo de 16 km ha cerrado la última fase de mis entrenamientos de preparación para mi segunda participación en el Maratón de Sevilla. Al contrario que en otras preparaciones, no estoy excesivamente cansado, aunque muscularmente estoy algo "tocado"; es evidente que después de tantos kilómetros de preparación, no se puede estar en perfecto estado de revista,  pero lo ocurrido hace unos meses en Munich no me permite estar tranquilo, ni confiar en que esta vez no vuelva a pasar. En cualquier caso, hay que ser positivo y lo que queda hasta el próximo domingo son entrenamientos muy suaves cuyo objetivo es mantener un buen tono muscular y poco más; es evidente que el trabajo ya está realizado y en esta semana ya no se puede conseguir ninguna mejora en el estado de forma.

¿Qué como estoy de forma? Difícil pregunta, porque aunque mis sensaciones son muy buenas y no estoy excesivamente cansado, nunca se puede saber a ciencia cierta si eso va a trasladarse a la carrera; a mi modo de ver, los ritmos que he sacado día a día son buenos, he completado las series a los ritmos previstos, aunque con alguna irregularidad y las tiradas largas han sido realmente brillantes, de manera que el conjunto de la preparación parece adecuado para el asalto definitivo de las tres horas, aunque de conseguirlo, no me van a sobrar muchos segundos.

Ahora toca descansar, estirar, corretear, volver a estirar y volver a descansar, pero sobre todo, toca planificar bien la carrera. Aún no he decidido todos los detalles, pero creo que lo ideal va a ser salir 1 ó 2 segundos por encima del ritmo objetivo, para posteriormente incrementar un poco el ritmo y mantener los deseados 4'15'' por kilómetros hasta el kilómetro 37; si consigo esto, intentaré acelerar para conseguir más margen de segundos en meta y en caso de ir justo, habrá que mantener el ritmo y pelear hasta el último metro de la carrera. Geles en los kilómetros 20, 28 y 35 y avituallamiento líquido en cada estación, alternando agua e isotónico. 

Lo que no está planificado aún es el "doping" moral y cuando digo esto, me refiero a la animación que voy a tener de nuevo este año en carrera. En las calles de Sevilla estarán seguro Marisa (como siempre) y Ángela, pero esta vez con la compañía de mi "entrenador psicológico" (Carlos) y de Rafa. Supongo que me podrán ver en al menos dos puntos de la ruta; para el resto, cuento con la posible aparición de algún amigo sevillano, como Alfredo, Emiliano o Javi "Maceda" y quizás algún otro, pero lo que tengo seguro es la animación de mi grupo de amigos "Maratonianos por el Mundo", que volveremos a estar ampliamente representados en la salida de este maratón y además de los que corremos, algunos darán apoyo en ruta, como el caso de Moncho y supongo que Torroles. Como veis, esta parte la tengo muy trabajada.

Y por último, están los imponderables, es decir, el clima, que puede hacerme mucho daño en forma de humedad, altas temperaturas o viento; me gustaría que se repitieran las condiciones del año pasado y en principio van a ser similares, pero hasta que no llegue el próximo viernes, es difícil augurar lo que va a pasar.

Dentro de una semana todos sabremos el desenlace del Maratón de Sevilla 2014, de nuevo renovado, con récord de participación y con el circuito más llano de Europa, según dicen; sea como sea, espero que cuando cruce la meta, mi reloj me indique que lo he conseguido.