La de Murcia es una prueba relativamente nueva y es evidente que se están esforzando para mejorar, pero les queda un duro trabajo por delante porque con una participación baja es más sencillo gestionar ciertos aspectos, pero también los fallos son más evidentes cuando se cometen.
Vamos a lo concreto y empecemos por la web, bastante trabajada, en dos idiomas, bien estructurada, atractiva y fácil de utilizar, en definitiva, lo que todos los corredores demandamos actualmente; la inscripción es sencilla y la información suministrada es bastante útil. Además, la información que recibe el corredor en el mail antes de la prueba es suficiente, no se exceden con los mensajes publicitarios y eso se agradece.
Pero pasemos a lo mollar, el fin de semana, cuyo punto neurálgico es la feria, ubicada en un complejo deportivo con piscina con espacio bastante bonito y suficiente para lo que se expone; yo acudí el sábado por la mañana a la hora en la que se disputaban carreras para niños, una buena iniciativa que ayuda a fomentar este deporte y a dar mayor visibilidad de su maratón a los propios murcianos. Por lo demás, en la feria se recoge el dorsal con comodidad, hay un stand con merchandising de la prueba, otro del patrocinador principal (EDP) y el resto son unos pocos stands con productos deportivos, alimenticios y algún que otro producto local. En general, la feria está bien teniendo en cuenta la participación, esperaba que fuera más pequeña, pero me sorprendió gratamente aunque no es comparable a la de competiciones más importantes, pero vale para el caso.
En este punto, me gustaría hablar de los voluntarios, en mi opinión, algunos son bastantes legos en la materia y eso se percibe ya con la entrega del dorsal que se realiza de una manera un poco desordenada y con la sensación de no tener muy claro la utilidad de la pulsera que entregan, de hecho a Jaime le entregaron una con número diferente al dorsal; la misma inexperiencia se percibe en los avituallamientos, pues en algunos no se ofrece la bebida, no informan de si te dan agua o isotónico y en la parte final algunos pasan, se sientan y dejan a los corredores que se alimenten por su cuenta.
Dicho esto, pasamos a la carrera que comienza en la plaza del Ayuntamiento, un espacio bonito pero no demasiado amplio, lo que puede generar problemas en caso de crecimiento de la prueba ya que actualmente resulta ya un poco incómodo; hay baños, pero no demasiados, supongo que por cuestión de espacio o quizás de presupuesto. No obstante, es fácil calentar por los alrededores si se necesita, pues el río está al lado.
La carrera se disputa en un circuito que comparten los atletas de media y maratón y en en parte los de 10Km, pero estos últimos salen 20 minutos más tarde, así que la salida se efectúa sin problemas; sin embargo, hay un tramo en el que se juntan las tres pruebas durante unos 3 Km y eso perturba bastante a los maratonianos porque tienen que adelantar a los atletas más lentos de la prueba corta y eso resulta molesto. En cuanto al recorrido, no es demasiado atractivo salvo su paso por el centro, pero como no conozco bien la ciudad no puedo sugerir alternativas, aunque si me atrevería a decir que el tramo de carretera entre huertas que acaba en un fondo de saco, es un claro candidato a ser eliminado.
La. señalización del recorrido es correcta, pero volvemos al tema de los voluntarios y es que durante la segunda vuelta se relajan en exceso de manera que llegas a un cruce y no tienes claro si girar a derecha o izquierda hasta que no estás prácticamente en el cruce y en otras ocasiones no tienes claro si girar antes o después porque nadie lo indica; tampoco es demasiada atinada la ubicación de la animación de la organización, pues hay un punto donde se solapan y sin embargo hay muchos tramos donde no hay nada, sobre todo en los kilómetros finales donde es más necesario para los corredores.
También es necesario hablar d elos avituallamientos, que se disponen sólo a un lado de la calle, en mesas grandes, pero desorganizadas; de momento, el primer avituallamiento que me dieron fue de isotónico, lo cual no es correcto, pero además, no están ubicados en los kilómetros correctos, se ofrece bebida o no según que caso y además es imposible saber donde está el agua y donde está el isotónico porque ni está señalado ni te lo dicen los voluntarios salvo en un par de casos; claramente, es un aspecto que puede mejorar mucho.
Y llegamos a meta, ubicada en un entorno excepcional, la Plaza de la catedral y posteriormente te dirigen a una zona de descanso bastante correcta en la que tras colgarte la medalla, te ofrecen agua, cerveza, alimento sólido y masajes si lo necesitas; en este caso, creo que es bastante adecuado.
No me habían hablado bien de esta carrera a nivel organizativo, pero tras disputarla mi opinión ha cambiado, no es tan malo como me habían dicho, pero tiene que mejorar m´s de lo que lo ha hecho esta edición, con el objetivo de tratar bien al corredor y lograr que la participación suba, pues creo que tiene posibilidades.
Pero pasemos a lo mollar, el fin de semana, cuyo punto neurálgico es la feria, ubicada en un complejo deportivo con piscina con espacio bastante bonito y suficiente para lo que se expone; yo acudí el sábado por la mañana a la hora en la que se disputaban carreras para niños, una buena iniciativa que ayuda a fomentar este deporte y a dar mayor visibilidad de su maratón a los propios murcianos. Por lo demás, en la feria se recoge el dorsal con comodidad, hay un stand con merchandising de la prueba, otro del patrocinador principal (EDP) y el resto son unos pocos stands con productos deportivos, alimenticios y algún que otro producto local. En general, la feria está bien teniendo en cuenta la participación, esperaba que fuera más pequeña, pero me sorprendió gratamente aunque no es comparable a la de competiciones más importantes, pero vale para el caso.
En este punto, me gustaría hablar de los voluntarios, en mi opinión, algunos son bastantes legos en la materia y eso se percibe ya con la entrega del dorsal que se realiza de una manera un poco desordenada y con la sensación de no tener muy claro la utilidad de la pulsera que entregan, de hecho a Jaime le entregaron una con número diferente al dorsal; la misma inexperiencia se percibe en los avituallamientos, pues en algunos no se ofrece la bebida, no informan de si te dan agua o isotónico y en la parte final algunos pasan, se sientan y dejan a los corredores que se alimenten por su cuenta.
Dicho esto, pasamos a la carrera que comienza en la plaza del Ayuntamiento, un espacio bonito pero no demasiado amplio, lo que puede generar problemas en caso de crecimiento de la prueba ya que actualmente resulta ya un poco incómodo; hay baños, pero no demasiados, supongo que por cuestión de espacio o quizás de presupuesto. No obstante, es fácil calentar por los alrededores si se necesita, pues el río está al lado.
La carrera se disputa en un circuito que comparten los atletas de media y maratón y en en parte los de 10Km, pero estos últimos salen 20 minutos más tarde, así que la salida se efectúa sin problemas; sin embargo, hay un tramo en el que se juntan las tres pruebas durante unos 3 Km y eso perturba bastante a los maratonianos porque tienen que adelantar a los atletas más lentos de la prueba corta y eso resulta molesto. En cuanto al recorrido, no es demasiado atractivo salvo su paso por el centro, pero como no conozco bien la ciudad no puedo sugerir alternativas, aunque si me atrevería a decir que el tramo de carretera entre huertas que acaba en un fondo de saco, es un claro candidato a ser eliminado.
La. señalización del recorrido es correcta, pero volvemos al tema de los voluntarios y es que durante la segunda vuelta se relajan en exceso de manera que llegas a un cruce y no tienes claro si girar a derecha o izquierda hasta que no estás prácticamente en el cruce y en otras ocasiones no tienes claro si girar antes o después porque nadie lo indica; tampoco es demasiada atinada la ubicación de la animación de la organización, pues hay un punto donde se solapan y sin embargo hay muchos tramos donde no hay nada, sobre todo en los kilómetros finales donde es más necesario para los corredores.
También es necesario hablar d elos avituallamientos, que se disponen sólo a un lado de la calle, en mesas grandes, pero desorganizadas; de momento, el primer avituallamiento que me dieron fue de isotónico, lo cual no es correcto, pero además, no están ubicados en los kilómetros correctos, se ofrece bebida o no según que caso y además es imposible saber donde está el agua y donde está el isotónico porque ni está señalado ni te lo dicen los voluntarios salvo en un par de casos; claramente, es un aspecto que puede mejorar mucho.
Y llegamos a meta, ubicada en un entorno excepcional, la Plaza de la catedral y posteriormente te dirigen a una zona de descanso bastante correcta en la que tras colgarte la medalla, te ofrecen agua, cerveza, alimento sólido y masajes si lo necesitas; en este caso, creo que es bastante adecuado.
No me habían hablado bien de esta carrera a nivel organizativo, pero tras disputarla mi opinión ha cambiado, no es tan malo como me habían dicho, pero tiene que mejorar m´s de lo que lo ha hecho esta edición, con el objetivo de tratar bien al corredor y lograr que la participación suba, pues creo que tiene posibilidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario