miércoles, 29 de agosto de 2012

El osito Misha vs Naranjito

El Maratón de la Paz de Moscú cumplirá treinta y dos ediciones el próximo de 9 de septiembre; su nacimiento coincidió con las primeras y únicas olimpiadas celebradas en suelo ruso, los Juegos Olímpico de Moscú 80, que estuvieron marcados por el boicot de Estados Unidos y otros 70 países en protesta por la invasión de Afganistán por parte de la, por entonces, Unión Soviética. Al margen de lo acontecido en la competición, los Juegos de Moscú fueron los primeros en el que el concepto de  mascota se introdujo como un elemento esencial y ese honor fue otorgado al simpático osito Misha, un oso pardo que simbolizaba a la nación soviética. Por aquel entonces yo tenía 14 años y seguí con interés el evento deportivo y las evoluciones de Misha, que además de mascota, se convirtió en protagonista de una serie de dibujos animados japoneses creados para la ocasión; incluso me compraron una camiseta conmemorativa de las olimpiadas en las que aparecía, como no, el osito Misha.
Dos años más tarde, España organizó el evento deportivo más importante que acogía nuestro país hasta entonces; creo que aquel mundial sirvió para que los españoles nos quitáramos unos cuantos complejos y disfrutáramos de un precioso espectáculo que tuve la oportunidad de vivir en directo en Valladolid. La mascota de aquel torneo fue Naranjito, una naranja cheposa y un poco simplona que, a pesar de generar ciertas críticas, fue el símbolo de nuestro mundial. La popular naranja también tuvo su serie de dibujos animados, aunque yo no la seguí mucho, seguramente porque con 16 años ya no me hacía gracia; sin embargo, tuve mi camiseta de Naranjito y algún producto más de lo que ahora se llama merchandansing y me sentí orgulloso de pertenecer a esa generación del Naranjito, que al borde de la mayoría de edad, vivió este acontecimiento con gran intensidad.

El próximo 9 de septiembre tomaré la salida en el XXXII edición del Maratón de la Paz de Moscú y no tengo ninguna duda que junto a mi, correrán muchos rusos pertenecientes a la generación del osito Misha e incluso algún representante de Naranjito, como yo. No competiremos por nuestros países, sino por nosotros, por mejorar nuestras marcas; no seremos rivales, sino compañeros en una dura prueba en la que la solidaridad siempre aflora entre participantes; ellos habrán preparado su maratón en el fresco verano ruso y yo en el agobiante verano español que nos ha tocado. Pero el día 9, a las 12 de la mañana todos estaremos en la línea de salida, más o menos nerviosos, más o menos preparados, más o menos emocionados, pero todos con la ilusión de completar los 42,195 km de una prueba apasionante, sea cual sea el lugar donde se corra.

lunes, 27 de agosto de 2012

Vaya semanita...

La semana pasada os conté que empezaba a "deskilometrar" y que lo más duro había pasado; es obvio que me equivoqué, porque Depa me había programado una de las semanas más duras de esta preparación. El aperitivo fue un rodaje de 40 minutos más pesas que realicé el lunes, pero a partir de entonces las cosas se complicaban con dos rodajes de 90 minutos, un duro fartlek en el que me fui a 20 km y tras un día de descanso, dos series de sis y cuatro mil y para rematar los 30 km de esta mañana; en total, más de 100 km que me han dejado hecho picadillo, pero contento.
Ha sido duro, pero pienso que el balance es muy positivo; he rodado a buenos ritmos a principio de semana con la ola de calor en su apogeo e incluso hice un buen fartlek, a pesar  de que la temperatura se acercó a los 30º; los entrenos del fin de semana han sido más frescos y quizás por ello las series fueron realmente buenas y la tirada larga de hoy me ha salido a 4'41'' y eso que no tenía ritmos prefijados. 
A falta de dos semanas, tengo buenas sensaciones, estoy rápido, resistente y con una moral de hierro, pero debo reconocer que mis últimos fracasos atléticos en los diezmiles y en Ponferrada, me tienen un poco preocupado. Es cierto que no llegué a esas carreras tan fuerte como creo que estoy ahora y también que no hice bien las cosas en los días previos, así que me preocupa es verme fuera de la carrera a las primeras de cambio, como me pasó en la Proniño o en Ponferrada, mis dos últimas pruebas. Es fundamental intentar correr muy concentrado en Moscú, más aún en un circuito de ida y vuelta y al parecer, tedioso, pues discurre constantemente por la orilla del río Moscova. Además en Moscú no va a haber globos de ritmos y espero no tener problemas con la numeración de los kilómetros, pues si la organización  decide escribirlos exclusivamente en cirílico, voy a tener un problema. Supongo que alguno se preguntará que se me ha perdido en Moscú, pero a pesar de las dudas que expreso, estoy ilusionado por correr en una ciudad tan interesante y en un maratón no tan organizado como en los que he competido hasta ahora; será una bonita experiencia.
Queda lo más fácil, una semana ligera y la última, prácticamente de descanso, en la que espero hacer las cosas bien, es decir, estirar, descansar y planear bien el asalto a las 3 horas 5 minutos; creo que soy capaz de hacer esa marca o menos, pero si soy capaz, tengo que demostrarlo.


lunes, 20 de agosto de 2012

Último rodaje largo

Ayer domingo realicé mi último rodaje largo en una calurosa mañana de domingo; sé que me repito, pero el verano que estamos padeciendo este año está siendo muy duro a causa las sucesivas olas de calor que han llegado a la Península Ibérica, sin dar una mínima tregua ni en julio, ni en agosto. Ayer, completé 34 kilómetros a una temperatura media de unos 24º, pues empecé a correr con 20º y acabé con 27º, con un calor asfixiante; y eso, que lo hice en los alrededores de Alcazarén, entre pinares, pero cuando las temperaturas son tan altas, es muy difícil que las sombras las mitiguen.
Pase lo que pase en Moscú, voy a recordar siempre la preparación de esta prueba, debido a la dureza que me supone entrenar con estas altas temperaturas. Dicen los entendidos, que el secreto para entrenar bien un maratón consiste en aguantar los entrenamientos con cansancio y con las piernas doloridas y si eso es verdad, me espera una buena marca en la meta del Kremlin; estoy descansando mal, madrugo mucho para entrenar, paso el día cansado debido a la influencia del calor... Creo que este será mi primer y último maratón de verano, pues lo correré en a estación estival.
Pero hay que ser positivo, porque el cansancio y el dolor de piernas están ahí, pero también los kilómetros de calidad que he soportado en condiciones tan desfavorables; he tenido malos días, sobre todo en los rodajes largos, pero también he completado entrenos de calidad con muy buenas sensaciones, tanto haciendo series, como ritmos controlados o últimamente fartleks. Creo que voy a llegar bien preparado a Moscú, aunque no soy capaz de percibirlo a falta de tres semanas para que comience la prueba. Además, en la capital rusa las condiciones climáticas van a ser mucho más bnévolas, pues espero correr a unos 10 grados de temperatura y tras una preparación en la que no he entrenado por debajo de los 20º, es probable que el efecto sea positivo.
Faltan 21 días y esta semana empiezo a bajar el kilometraje, aunque todavía va a ser dura, pues remataré con un rodaje de 30 km, pero sin ritmos exigentes que cumplir. me queda lo fácil, si se puede considerar así lo que tengo por delante, pero lo que tengo claro es que después de ayer la cuenta atrás ha comenzado definitivamente; no es hora de relajarse, sino de apretar los dientes y realizar el último esfuerzo que evite que tire por la borda lo sembrado hasta ahora. Y a falta de tres semanas, creo que la siembra va a ser productiva y espero que la cosecha llegue el día 9 en forma de una marca ligeramante por encima de las tres horas; para eso he trabajado tan duro.

viernes, 10 de agosto de 2012

Inscrito en Moscú... por fin

Falta un mes para que el Maratón de la Paz de Moscú comience al pie de la catedral de San Basilio y por fin puedo asegurar que estaré en la línea de salida junto al resto de participantes; digo esto, porque las inscripciones se han abierto en estos días, a falta de poco más de un mes para la celebración del evento, un hecho poco común. Pero debo mentalizarme, porque desde el primer momento he sabido que la capital de Rusia no cuenta con un maratón al nivel de los que he corrido hasta ahora, no sólo por sus inscripciones tardías, sino por su recorrido poco atractivo en una ciudad tan grande y la aparente desidia de sus organizadores para atraer runners a una carrera que no cuenta con una elevada participación. Además, he consultado con varios participantes españoles de otras ediciones y todos coinciden en la pobre organización de una carrera que podría estar entre las mejores de Europa. Sin embargo me sigue atrayendo correr en esta peculiar ciudad, a pesar de que lo voy a hacer en un circuito de doble vuelta que discurre alrededor del río Moscova y que comienza, agarraos, a las 12 de la mañana, una hora muy poco atlética, más propia de de paseo dominguero y vermut posterior.
Pues si, correré en Moscú y para eso sigo entrenando en este verano tan caluroso que estamos padeciendo; sabía que la preparación iba a ser dura, pero no pensaba que iba a pasarlo tan mal como lo estoy pasando. El calor es asfixiante, lo cual me obliga a madrugar mucho para entrenar de 20 a 25 grados, es decir, con mucho calor. Alterno días buenos y malos; las series de momento están saliendo, pero los rodajes largos se me están atragantando, quizás porque tras dos horas corriendo, mi cuerpo es incapaz de refrigerar y mi rendimiento se resiente. Como ya he comentado otras veces, lo más duro del entrenamiento maratoniano llega durante el último mes y medio y está coincidiendo con un mes y medio de aupa en cuanto a la meteorología.
Pero no voy a ser pesimista, creo que las cosas saldrán bien si aguanto un poco más; estoy en la fase más dura, pues la semana pasada cayeron 106 km y en esta voy a acabar acercándome a los 90 con un rodaje de 32 Km en un día en el que se pueden alcanzar los 40%. ¿Conseguiré llegar a punto entrenando con estas condiciones? Yo espero que si, es más, espero que me sirva para hacer una buena marca, considerando que la temperatura en Moscú rondará los 10 grados el día de la prueba.
Queda poco, pero muy duro y voy a darlo todo para estar a punto el próximo 9 de septiembre a las 12 de la mañana junto a la catedral de San Basilio. Será mi decimotercer maratón y quién dice que que ese número no me va a dar suerte para conseguir para mi crono en  ¿3 horas 05'?.