miércoles, 9 de junio de 2010

Burdeos: fútbol, lesión, carrera y vino

El campeonato europeo de fútbol para controladores aéreos se ha celebrado este en año en la bonita ciudad de Burdeos, donde acudí con mis compañeros a pasar la semana. No era mi intención disputar el campeonato al mismo ritmo de años anteriores, pero si jugar algunos minutos a pesar de mi "retirada". Además, me llevaba los "bártulos" de correr para compatibilizar ambas actividades.
Pero parece que el fútbol me la tiene jugada ultimamente y tras salir al campo para sustituir a un compañero, en la primera jugada, mi internada por banda acabó con un búlgaro metiéndome el cuerpo y mandándome al suelo con tal violencia que la parte inferior de mi espalda quedó totalmente maltrecha. No podía seguir.Intenté correr al acabar el partido, pero era imposible.
El día siguiente estaba recuperado, aunque no bien del todo. Jugué medio tiempo y luego me fui a correr 50 minutos por el Parque Floral de Burdeos, una delicia de recorrido sobre caminos de tierra salpicado por arroyos, césped y flores. Corrí con dolor, pero fue remitiendo mientras iba calentando las piernas. Esa tarde, visité Saint Emilion, la cuna del vino de Burdeos, donde aparte de comprar alguna botella, degusté varios vinos y tuve una conversación muy interesante sobre el vino bordelés con un bodeguero local.
Volví a correr en mi último día de estancia, esta vez por el centro de Burdeos, una ciudad tranquila, muy bien urbanizada, con muchos jardines y zonas peatonales, que hacen de la carrera una delicia.
El balance del torneo de Burdeos no ha sido muy bueno. Quedamos en la posición 25 y me lesioné, pero la visita a Saint Emilion y los rodajes por la ciudad me quitaron el mal sabor de boca. Espero volver y sin lesionarme.